Aunque estos pueden permanecer sobre la piel a lo largo del día, es necesario removerlos antes de ir a dormir para evitar que se acumulen en la piel.
El problema es que muchas ignoran la importancia de hacerlo todos los días y, con la excusa de estar demasiado cansadas, van a la cama sin retirarlos.
Los ácidos grasos esenciales y compuestos antioxidantes del aceite de almendras se pueden emplear para reducir las agresiones que sufre la piel por los químicos de los cosméticos y las toxinas del ambiente.
Sus activos naturales remueven las impurezas que se retienen en los poros y, a su vez, desinflama y reduce el riesgo de desarrollar problemas de acné.
¿Cómo utilizarlo?
Frota una pequeña cantidad de aceite de almendras sobre el rostro y retira el maquillaje con un disco de algodón o paño limpio.
