Consumir este cereal por las mañanas nos aporta energías y nutrientes para afrontar la jornada. Además, la avena también sirve para controlar el colesterol “malo” y mejorar la salud del corazón.
Este rico cereal, que se puede combinar con lácteos, zumos, tartas o ensaladas, contiene una buena dosis de fibras solubles las cuales reducen el “colesterol malo”.
Si bien este compuesto también está presente en otros alimentos como, por ejemplo, las manzanas, los frijoles o las ciruelas, lo cierto es que en la avena se concentra más.
Por lo tanto, consumirla a diario disminuye los niveles de colesterol en sangre y eso trae como consecuencia otras ventajas: beneficiar el corazón y mejorar el aparato circulatorio.
Las saponinas ayudan a la fibra a eliminar el colesterol
Las avenatramidas, gracias a su acción antioxidante, traen muchos beneficios a la salud cardíaca y evitan que se acumulen los radicales libres (principales causantes de aterosclerosis).